sin palabras, cero imagenes
los guionistas de Hollywood llevan ya su tiempo en huelga
bien
y mas allá que tengan la razon
(exigen % y regalías x todo lo digital que viene
puesto ya se los vacunaron con el tema del vhs y el dvd)
lo importante es esta cosa de David vs Goliat
y, de paso, están, en esta era mediática
y tan, tan ESCRITA
(¿qué es internet y todo lo narrativo e informativo
sino palabras?),
obligando al resto a darse cuenta
lo importante que son
aquellos que escriben
para la pantalla (chica, grande, enana, mediana, electrónica)
porque aunque lo hagamos mal, diran muchos, sin guión, lo siento,
no hay nada: los eléctricos, el catering, el sonido, el montaje, el vestuario,
los actores... ninguno de ellos son necesarios
aquellos mismos que parecen clave en un set, sin palabras en un papel,
se vuelven innecesarios
y, lo que es peor, el set desaparece
y, al rato, van despareciendo
las series,
los programas,
las películas
dos o tres cosas han surgido o quedado claro:
la principal, supongo, es esto de "primero estuvo la palabra"
que una tropa de losers, digamos,
un montón de gente neurótica o lastimada o frik,
que viven de los lápices
o de sus laptops, que se dedican a ver cine y a leer, para crear historias y los dialogos que están dentro de esas historias,
que este gremio de segundones, digamos, gente mal pagada (o que ganan menos que las estrellas y los productores y los directores famosos) terminen por paralizar a una de las industrias mas poderosas del mundo, me parece fascinante.
genial.
creativo.
justicia divina
insisto: porque sin guion, bueno o malo, no hay nada.
nada
ni buenas series ni malas teleseries
ni grandes peliculas o asquerosas secuelas
nada
todo por un lapiz
y la mente que lo hace moverse
y ahora está esta campaña, Speechless Hollywood,
http://speechlesswithoutwriters.com/
en que los huelguistas, apoyado por actores atinados, demuestran,
en acción, lo que pasa si ni hay palabras
http://www.youtube.com/user/speechlesshollywood
hay cosas muy, muy buenas y graciosas
aqui va mi favorito, con Woody Allen, mudo
(casi parece una toma de Manhattan, casi 30 años después)
aunque en rigor, no se si su cumple su cometido porque, sin palabras, uno se rie a
gritos igual, pero lo cierto es que todos los clips son buenos, y los actores participantes son aquellos que siempre se la juegan: entre ellos,
Sean Penn, Susan Sarandon y Tim Robbins, Holly Hunter, Laura Linney
y la gran Patricia Clarkson (recitando la guía de teléfonos)
entre otros.
La huelga del Sindicato de Guionistas Americanos (WGA) ingresó en su segundo mes con escasas esperanzas de solución para la peor crisis laboral que afronta Hollywood en más de dos décadas. Más de 10.500 miembros del WGA ha paralizado el rodaje de una veintena de series de televisión y de varias películas, incluyendo una secuela de El Código Da Vinci (lo que, por cierto, es algo positivo).
La disputa laboral entre guionistas y productores se centra en los ingresos que los escritores reciben por la venta de las series de televisión en discos DVD, una práctica que genera sustanciales ingresos para los estudios de televisión, y también por las emisiones de las series por internet.
bien
y mas allá que tengan la razon
(exigen % y regalías x todo lo digital que viene
puesto ya se los vacunaron con el tema del vhs y el dvd)
lo importante es esta cosa de David vs Goliat
y, de paso, están, en esta era mediática
y tan, tan ESCRITA
(¿qué es internet y todo lo narrativo e informativo
sino palabras?),
obligando al resto a darse cuenta
lo importante que son
aquellos que escriben
para la pantalla (chica, grande, enana, mediana, electrónica)
porque aunque lo hagamos mal, diran muchos, sin guión, lo siento,
no hay nada: los eléctricos, el catering, el sonido, el montaje, el vestuario,
los actores... ninguno de ellos son necesarios
aquellos mismos que parecen clave en un set, sin palabras en un papel,
se vuelven innecesarios
y, lo que es peor, el set desaparece
y, al rato, van despareciendo
las series,
los programas,
las películas
dos o tres cosas han surgido o quedado claro:
la principal, supongo, es esto de "primero estuvo la palabra"
que una tropa de losers, digamos,
un montón de gente neurótica o lastimada o frik,
que viven de los lápices
o de sus laptops, que se dedican a ver cine y a leer, para crear historias y los dialogos que están dentro de esas historias,
que este gremio de segundones, digamos, gente mal pagada (o que ganan menos que las estrellas y los productores y los directores famosos) terminen por paralizar a una de las industrias mas poderosas del mundo, me parece fascinante.
genial.
creativo.
justicia divina
insisto: porque sin guion, bueno o malo, no hay nada.
nada
ni buenas series ni malas teleseries
ni grandes peliculas o asquerosas secuelas
nada
todo por un lapiz
y la mente que lo hace moverse
y ahora está esta campaña, Speechless Hollywood,
http://speechlesswithoutwriters.com/
en que los huelguistas, apoyado por actores atinados, demuestran,
en acción, lo que pasa si ni hay palabras
http://www.youtube.com/user/speechlesshollywood
hay cosas muy, muy buenas y graciosas
aqui va mi favorito, con Woody Allen, mudo
(casi parece una toma de Manhattan, casi 30 años después)
aunque en rigor, no se si su cumple su cometido porque, sin palabras, uno se rie a
gritos igual, pero lo cierto es que todos los clips son buenos, y los actores participantes son aquellos que siempre se la juegan: entre ellos,
Sean Penn, Susan Sarandon y Tim Robbins, Holly Hunter, Laura Linney
y la gran Patricia Clarkson (recitando la guía de teléfonos)
entre otros.
La huelga del Sindicato de Guionistas Americanos (WGA) ingresó en su segundo mes con escasas esperanzas de solución para la peor crisis laboral que afronta Hollywood en más de dos décadas. Más de 10.500 miembros del WGA ha paralizado el rodaje de una veintena de series de televisión y de varias películas, incluyendo una secuela de El Código Da Vinci (lo que, por cierto, es algo positivo).
La disputa laboral entre guionistas y productores se centra en los ingresos que los escritores reciben por la venta de las series de televisión en discos DVD, una práctica que genera sustanciales ingresos para los estudios de televisión, y también por las emisiones de las series por internet.
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